La rendición de cuentas a la ciudadanía es el deber que tienen las autoridades de la Administración Pública de responder públicamente, ante las exigencias que realice la ciudadanía, por los recursos, las decisiones y la gestión realizada en ejercicio del poder que les ha sido delegado, además que garantiza la calidad, pertinencia y oportunidad de la información o mensaje que se quiere comunicar a los grupos de interés.
Para poder conocer si esto se está logrando, se realiza un diagnóstico, el cual, es el punto de partida técnico para el diseño de la estrategia. Éste se realiza a partir de la elaboración de un balance de debilidades y fortalezas internas sobre las acciones de Rendición de Cuentas efectuadas en el año inmediatamente anterior.
El presente diagnóstico se estructura bajo la metodología dispuesta por el Departamento Administrativo de la Función Pública en el Manual Único de Rendición de Cuentas, el cual comprende debilidades y fortalezas de los mecanismos utilizados de rendición de cuentas; análisis cuantitativo y cualitativo y los actores (clientes o grupo social objetivo), evaluación de la audiencia pública de rendición de cuentas y otros. Esta información se constituye en el punto de partida para el diseño de la nueva estrategia de rendición de cuentas para la vigencia 2021.
Para la Institución, la Rendición de Cuentas es un mecanismo que ofrece oportunidades de mejora para la gestión institucional, garantizando mayor transparencia en los procesos ejecutados.